"Las ideologías no están muy cotizadas”

Tirso Mejía Ricart. Vicepresidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD)

Por Oscar Quezada / El Caribe

Tirso Mejía Ricart es considerado uno entre los políticos dominicanos más honorables.

Hay quienes lo ven como símbolo de moral, trabajo y propulsor de importantes reformas dentro del PRD. Háblenos de sus comienzos en ese partido.

Yo llego al partido al inicio de un nuevo proceso de democratización del país. Primero estuve en el exilio. Salí del país en el año 1960 y regresé en 1962. Luego, en el año 1965, me fui a estudiar sicología y siquiatría en Alemania. A mi regreso, me integré a la revolución constitucionalista (de Abril del 65). Estuve vinculado al Movimiento Renovador Universitario (MRU).

Al Partido Revolucionario Dominicano (PRD), ingresé a principios del 1970. Desde entonces, estoy ahí. Ocupé diferentes posiciones: fui director de la escuela (de formación política), director del departamento de Educación, de Doctrinas, director electoral y vicepresidente y presidente interino, durante más de un año.

Fui diputado y tuve en algunas posiciones públicas, como embajador y secretario de Estado a cargo de las Reformas del Estado (Comisión Nacional para la Reforma del Estado-Conare).

Su vida en el partido ha sido muy activa. Entonces, ¿qué explica su ausencia en la pasada contienda electoral?

Realmente, yo me ausenté un tanto de esta campaña, porque tenía varias razones; entre otras, porque ya uno está un poco fatigado.

Las perspectivas que se veían eran pocos halagadoras, porque había una desunión dentro del partido, aunque finalmente hubo una reagrupación de fuerzas y el candidato (Miguel Vargas Maldonado) asumió un discurso coherente y progresista, que de haber comenzado así, hubiera superado por mucho los números que alcanzó, que son números buenos, en el sentido de que asoma al PRD como opción de poder.

¿Sus reflexiones aluden debilidades y perspectivas en esa organización?

El PRD no ha podido vencer la desconfianza que tienen sectores importantes de la población en sus ejecutorias como partido. A esto se suma la caja de resonancia que ha sido la maquinaria propagandista del PLD (Partido de la Liberación Dominicana), pues ha mantenido fuera de sus filas a sectores importantes de la clase media y superiores.

Las perspectivas hay que verlas en dos ángulos: evitar que se retroceda, porque ya están sonando voces que auspician candidaturas y la gente no acaba de respirar por las elecciones pasadas. Si ahora se desata una lucha interna por las candidaturas, primero congresionales y municipales y luego presidenciales, realmente las posibilidades de llegar serán muy limitadas.

He propugnado para que se prohíba cualquier tipo de campaña, de las congresionales y municipales, hasta el 2009 avanzado, y las presidenciales después de esas elecciones.

Eso es lo que manda el librito. O sea, la perspectiva está en detener o no las aspiraciones extemporáneas. Lo segundo es darles un vuelco a la estrategia del partido en relación a la atracción de nuevos sectores

Nuevas estrategias de captación de miembros y militantes, ¿a eso se refiere?

Hay que abrir espacios para los jóvenes, no para que se pongan en la cola, porque muchos no se van a sentir cómodos con gente con menos calificación que ellos, sino para que entren como y dirigentes a posiciones de relevancia.

Dentro de las mujeres y de los jóvenes, hay un déficit importante, porque (el PRD) no ha podido ofrecer esperanzas superiores a las de un gobierno que ha estado ofreciendo becas y ha estado cubriendo universidades y cosas que atraen públicos. Hay que atraer jóvenes y mujeres, que fue donde estuvo el déficit cuantitativo en las pasadas elecciones.

Dice usted mujeres, pero el PRD creó la Federación Dominicana de Mujeres Social Demócratas (Fedomusde), que es un organismo de apertura y participación partidaria de género.

Yo soy un poco crítico de la organización de las mujeres, a pesar de que fue la primera que se hizo en el PRD y el país, porque esa organización ha adolecido, desde siempre, del defecto de que dependen de las esposas y las novias de los dirigentes principales. Entonces, ellas actúan un poco a su antojo y no dejan pasar a las personas que, teniendo méritos, no forman parte de su círculo y amistades.

Se ha limitado el ingreso, porque ha estado dirigido por algunas dirigentes amparadas en su calidad de esposas o novias de dirigentes. Yo creo que hay que darle un vuelco a Fedomusde, para que se abra más a la población.

Y las doctrinas, ¿piensa que el PRD pone empeño en preservar los postulados ideológicos que cimentaron su proyección como un partido de masas?

En estos tiempos, las posturas ideológicas no están muy cotizadas en el seno de los partidos actuantes, porque les induce limitantes. Es más fácil tratar de comprar u optar por apoyos económicos.

Hay poca estima por una prédica que vaya más allá de esto es lo tuyo, esto es lo mío. No es un problema del PRD, el PLD también ha hecho lo mismo y el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC).

Es igual que la reelección, que en el PRD significó la división del partido. Las ideologías han quedado un poco atrás y hay que tratar de revitalizarla.

Separar las municipales de presidenciales

Mejía Ricart explica que el PRD ya trazó sus directrices sobre la postura que adoptarán frente al proceso de modificación a la Carta Magna que se avecina. “En materia constitucional hay varios nudos importantes.

Uno de ellos es el cambio eventual de fecha de las elecciones. Se habla de juntar las elecciones.

Nosotros hemos sido partidarios de que se junten las elecciones congresionales y presidenciales, que responden al mismo poder nacional, y dejar fuera las elecciones municipales, para dos años depués, porque ahí se ha mantenido el arrastre y no inciden de manera determinante ni mucho menos el poder principal.

Por eso, hay muchos síndicos que no han seguido la ruta que recibió las elecciones congresionales.

Optimismo. “La de las pasadas elecciones, fue una derrota relativa. Un 40.48% es una tasa alta. Si todo fuera normal, el PRD podría ganar en el año 2012”.

Proyección. “El partido tiene varios retos importantes, uno de ellos es evitar divisiones y pugnas, incluso las que son normales, por candidaturas extemporáneas”.

Observación. “El PLD está muy corrompido a nivel de la dirección, pero todavía conserva, en las capas medias, gente calificada y que no está contaminada. Eso es una ventaja”.

Mejía Ricart propone que el evento previsto para analizar la situación interna del PRD y trazar las líneas de acción con miras a los próximos comicios presidenciales y congresuales y municipales, sea un congreso, “que debe analizar cómo estamos ahora mismo”.

Quién es

Edad: 71 años
Educación: siquiatra, historiador y político.
Oficio: educador y escritor.