miércoles, 17 de diciembre de 2008

El Mismo PRD

Creo que este artículo de Cesar Pérez es para que nos motive a reflexionar sobre la situación del país y el partido. ¿Qué es lo que realmente queremos como partido?

Modesto Reynoso Cuello

Sociólogo

Por César Pérez

Sí, la base del Partido Revolucionario Dominicano, PRD, sigue siendo popular con todas las virtudes y defectos propios de ese sector social y en esencia, mantiene una identidad forjada en un pasado de lucha por las libertades, la inclusión social, contra una invasión extranjera y en la ardorosa devoción a un líder carismático que era la personificación de dicha base.

Igualmente, su dirección sigue divorciada de ese activo social y político del país todo, mantiene su inveterada incapacidad de actuar como colectivo con un mínimo de racionalidad y con reglas elementales que normen su funcionamiento interno que definan sus roles de oposición o de gobierno, por lo cual sigue fortaleciendo la percepción que se tiene en grandes franjas de la población de que su incapacidad de autogobernarse lo inhabilitan para gobernar el país.


Es el mismo PRD que no sabe aprovechar las circunstancias o procesos que les favorecen, que así como en el 2002, luego de su resonante victoria en las elecciones congresuales y municipales se embarcó en un proyecto reeleccionista de nefastas consecuencias para el país; ahora, luego de superar con relativo éxito un proceso electoral que auguraba ser un fracaso rotundo, se embarca en la recurrente lucha de facciones por una nominación presidencial para unos comicios que habrán de celebrarse dentro de prácticamente cuatro años.


Como siempre, desde que abandonó su tradición de hacer oposición social y política, la dirección perredeista desaprovecha un buen desempeño electoral y de ejercer colectivamente su papel de partido de oposición frente a un gobierno que a pesar de apenas iniciarse ya se encuentra en franco proceso de desgaste y de generalizado cuestionamiento.


Se podría decir que el PRD, más que una colectividad política es un estado de ánimo, como algunos urbanistas definen la ciudad.
Ese estado de ánimo, que en esa colectividad política significa un profundo sentimiento de pertenencia y de identidad partidaria, se recuperó significativamente en el proceso electoral del presente año, pero esta vez, al igual que en la lucha por la nominación del candidato presidencial de 2004, la preocupación central de los principales grupos al interior de ese partido es por la candidatura para el lejano 2012 y no por los intereses generales de sus bases ni de la población.


Algunos connotados dirigentes expresan una necesidad de que ese partido asuma un giro hacia posiciones políticas que lo sintonice con la sus bases e importantes sectores de la sociedad civil y con los tiempos que viven algunos sectores de la izquierda latinoamericana. También que vuelva a las calles a exigir, como prometieron hacer durante la pasada campaña electoral, que el presente gobierno cambie sus prioridades en el uso de los recursos que administra.


Es cierto que si el PRD asume una posición de clara oposición, vinculada a la población con acciones de protestas en todos los espacios, no solamente se convertiría en el punto de referencia de una población que se siente desprotegida frente a la prepotencia del poder, sino que iría perfilándose como clara mayoría de cara a los próximos comicios congresuales y municipales de 2010.


Sin embargo, eso no entra dentro de la lógica de los grupos mayoritarios que internamente se pelean por el control del partido, no para dirigirlo en el sentido de lo que siempre han esperado las bases de su dirección, sino para imponer el candidato presidencial del 2012. Hasta el momento ninguno de esos grupos han expresado un proyecto de clara opción de cambio y de clara vinculación con los reclamos de inclusión, de lucha social y de institucionalización democrática del país.


En tal sentido, los sectores de ese partido e incluso los del partido de gobierno que desean realmente que las cosas cambien, para evitar sus definitivas muertes política sólo les queda como salida dar la batalla por sus posiciones, a través de acciones de vinculación con diversos sectores de la sociedad civil y grupos políticos alternativos en diferentes escenarios de lucha social.


De lo contrario, que se preparen para ver la imposición de candidaturas cuyo único compromiso es con los poderes fácticos de este país y para seguir cargando, junto a todos nosotros, el pesado baldón de ser los primeros en exportación de mujeres para la prostitución, los primeros en la lista de los más corruptos y los últimos en inversión en la educación y en la gente, en sentido gener

No hay comentarios.: