El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pronuncia un discurso hoy, 4 de marzo de 2009, durante la Cena del Comité Congresional en la Sala Este de la Casa Blanca en Washington. (Foto: EFE )
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El presidente de EU inauguró la cumbre en la Casa Blanca. Los cerca de 120 participantes se dividirán en cinco grupos para abordar aspectos concretos de la reforma.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se fijó hoy el objetivo de lograr la reforma del sistema sanitario en su país "para fines de este año".
Al inaugurar una cumbre en la Casa Blanca sobre la reforma del sistema sanitario público, Obama afirmó que los costes cada vez más altos de la cobertura médica, que hacen que cada 30 segundos una familia se declare en quiebra, representan "la mayor amenaza contra la salud fiscal" del país.
Los costes sanitarios, indicó, han crecido en los últimos ocho años cuatro veces por encima de los salarios y para este año podrían hacer que 1.5 millones de personas pierdan sus hogares.
"Si queremos crear empleos y reconstruir nuestra economía debemos atajar los costes aplastantes de la sanidad este año, en esta Administración", indicó Obama.
Su objetivo, insistió, es "aprobar una reforma exhaustiva del sistema sanitario para finales de este año".
El presidente estadounidense había indicado desde la campaña electoral que quería hacer de la reforma del sistema sanitario una de sus prioridades.
En la propuesta de presupuesto que presentó la semana pasada se encuentra una partida de 634 mil millones de dólares para crear un fondo que sirva de "entrada" para sufragar la reforma sanitaria a lo largo de diez años.
La cumbre sobre salud que se celebra hoy en la Casa Blanca tiene un formato similar a la sostenida hace dos semanas sobre responsabilidad fiscal.
Tras la intervención de Obama, los cerca de 120 participantes, que agrupan desde legisladores a representantes de empresas sanitarias, pasando por médicos y pacientes, se dividirán en cinco grupos para abordar aspectos concretos de la reforma.
La cumbre concluirá con una sesión plenaria con espacio para preguntas y respuestas en la que también participará el presidente.
En su discurso, Obama prometió que el proceso será "tan transparente como sea posible" y en él se escuchará "cada voz" y "cada idea".
"Seguir como estamos es la única opción que no se podrá considerar. Y aquellos que busquen bloquear una reforma a toda costa esta vez no vencerán", sostuvo.
Al inaugurar una cumbre en la Casa Blanca sobre la reforma del sistema sanitario público, Obama afirmó que los costes cada vez más altos de la cobertura médica, que hacen que cada 30 segundos una familia se declare en quiebra, representan "la mayor amenaza contra la salud fiscal" del país.
Los costes sanitarios, indicó, han crecido en los últimos ocho años cuatro veces por encima de los salarios y para este año podrían hacer que 1.5 millones de personas pierdan sus hogares.
"Si queremos crear empleos y reconstruir nuestra economía debemos atajar los costes aplastantes de la sanidad este año, en esta Administración", indicó Obama.
Su objetivo, insistió, es "aprobar una reforma exhaustiva del sistema sanitario para finales de este año".
El presidente estadounidense había indicado desde la campaña electoral que quería hacer de la reforma del sistema sanitario una de sus prioridades.
En la propuesta de presupuesto que presentó la semana pasada se encuentra una partida de 634 mil millones de dólares para crear un fondo que sirva de "entrada" para sufragar la reforma sanitaria a lo largo de diez años.
La cumbre sobre salud que se celebra hoy en la Casa Blanca tiene un formato similar a la sostenida hace dos semanas sobre responsabilidad fiscal.
Tras la intervención de Obama, los cerca de 120 participantes, que agrupan desde legisladores a representantes de empresas sanitarias, pasando por médicos y pacientes, se dividirán en cinco grupos para abordar aspectos concretos de la reforma.
La cumbre concluirá con una sesión plenaria con espacio para preguntas y respuestas en la que también participará el presidente.
En su discurso, Obama prometió que el proceso será "tan transparente como sea posible" y en él se escuchará "cada voz" y "cada idea".
"Seguir como estamos es la única opción que no se podrá considerar. Y aquellos que busquen bloquear una reforma a toda costa esta vez no vencerán", sostuvo.
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