viernes, 11 de abril de 2008

Moguel: Leonel Fernández; un mal ejemplo.

Reportado por Dr. Puro Fajardo
De la oficina de Miguel Vargas Maldonado

Miguel Vargas responde a Leonel:
El déficit es moral, falta de integridad y deterioro institucional


En un debate quedaría evidenciado como incumplidor y mentiroso, como violador de la Constitución y las leyes, y como estafador de la confianza que el pueblo depositara en él.

Delira. Por ese déficit de pensamiento que el candidato reeleccionista atribuye a los dominicanos y dominicanas, es que no ha sentido necesidad de explicar en cuáles cuentas bancarias depositó y qué manejo le ha dado a los 130 millones de dólares del contrato ilegal con la empresa Sun Land.

La verdadera crisis que se padece en la República Dominicana no es de conceptualizaciones ni de pensamiento, sino de degradación moral, de corrupción, y de irrespeto a las instituciones en que debe descansar el ordenamiento de una nación democrática, de todo lo cual precisamente el presidente Leonel Fernández da el mal ejemplo.

El ingeniero Miguel Vargas, nuestro candidato presidencial por el Partido Revolucionario Dominicano respondió al señalamiento que hiciera el presidente Fernández, de que para él no tiene sentido acudir a un debate entre los candidatos presidenciales porque entre ellos hay una crisis de conceptualizaciones, de pensamiento.

Vargas afirmó que una crisis de conceptualización se produce cuando los dominicanos y dominicanas relacionan el echo de que el 16 de agosto de 2004 observaron al presidente Fernández, “con la mano sobre la Biblia y arropado por la Bandera Nacional, jurando que cumpliría y haría cumplir la Constitución y las leyes, y a lo largo de estos 4 años lo han visto es burlarse de esos mandatos para comprometer el patrimonio público y repartir a manos llenas el dinero que la gente paga de impuestos para mantener la lealtad política de gente que no realiza ninguna labor en el Estado”.

Crisis de pensamiento es la que produce el presidente reeleccionista al mentirles en sus propias caras a los directores de medios informativos, y a través de ellos al país, diciéndoles que el pago de las llamadas nominillas no implica malversación de los fondos públicos, y en consecuencia que no es violación a múltiples leyes que prescriben el mal uso de los mismos.

Miguel señala que la declaración del presidente Fernández lo que refleja es su prepotencia y su creencia de que él es el único dominicano con capacidad para pensar y razonar, por eso la enorme campaña de endiosamiento a su personalidad que se hace con los fondos públicos.

La creencia de Fernández es una herencia del pasado, cuando debido a la dictadura sólo algunas personas podían capacitarse en el país o viajar al exterior a cursar estudios especializados.

Hoy el país cuenta con una gran cantidad de profesionales con doctorados y maestrías, con especialistas en todas las áreas del saber, por lo que resulta un acto de delirio del candidato reeleccionista creerse que sólo él tiene capacidad de razonamiento”.

En lo que posiblemente el candidato reeleccionista no tiene competencia es en cuanto a su cinismo y su capacidad de mentir, ahí no hay quien le gane”.

Las verdaderas razones por las que Fernández tiene miedo de presentarse a un debate con los demás candidatos presidenciales es porque en un escenario de intercambio de ideas, de comparación de datos y conductas, él quedaría evidenciado como incumplidor y mentiroso, como violador de la Constitución y las leyes, y como estafador de la confianza que el pueblo depositara en él.

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